
Jesús Vázquez se ha convertido en el nuevo embajador del país de Burundi, gracias a la colaboración de una de las grandes marcas del mercado farmacéutico como es Hansaplast; gran accionista mayorista en donar dinero a este país.
Cuentan fuentes cercanas que al principio se preocupaban mucho por Jesús, ya que temían que muriera desangrado, pero más tarde él mismo confesó que tenía un contrato con Hansaplast y que se cortaba a propósito para comprar tiritas de esta marca, ya que ésta entidad firmó un acuerdo con Unicef para donar el 40% de sus beneficios a los niños de Burundi.
En Burundi están eternamente agradecidos a Jesús y ya celebran en su honor una de las fiestas más grandes del pueblo.
